Mitos sobre la sangría: es solo para turistas

La sangría es una bebida muy atractiva en mercados extranjeros

En el último post desmentimos el mito que afirma que la sangría lleva alcohol siempre, pero aún hay otra falsa creencia que envuelve esta bebida: que es solo para turistas. Normalmente se asocia a paella, verano y fiesta, los complementos perfectos de los visitantes de nuestro país. Pero nada más lejos de la realidad. Aunque sea un reclamo turístico para extranjeros de todo el mundo, también se trata de una bebida muy popular entre la población española, que puede tener las mismas posibilidades en la mesa que un buen vino.

De hecho, la Unión Europatiene una normativa según la cual España y Portugal son los únicos países autorizados para elaborar sangría. Pese a ello, el lugar de origen de esta bebida no se suele ubicar exactamente en la Península Ibérica. Existe una teoría que lo sitúa en las Antillas cuando esta era todavía una colonia británica. Así, “sangría” provendría del término inglés sangaree. Del mismo modo, es conocido el consumo de sangría desde la primera década del siglo XIX en Ecuador.

Además, lejos de las versiones low-cost con vino de poca calidad y exceso de azúcar que en ocasiones encontramos en el entorno turístico, cada vez es más habitual encontrar más variedades gourmet y premium en los supermercados, para hacer accesible una sangría de calidad. Estas opciones cuentan con una base seleccionada y las frutas que mejor combinan con la variedad de uva de base, para potenciar el gusto y transmitir los mejores aromas. Así, se consigue toda una experiencia, tanto para habitantes de nuestro país como para aquellos que tan solo están de visita.