El poder de decisión: llena de carácter y personalidad tu día a día

El poder de decidir sobre nuestro presente y futuro es una de las mayores características que tenemos los seres humanos, y de la que debemos sacar provecho. Desde las elecciones más simples y banales hasta las más complejas e importantes, todas estas decisiones nos definen. Pero no sólo eso, sino que también nos dan libertad y nos aportan el control sobre nuestras vidas. Se convierten en pequeños dilemas que acaban determinando nuestros gustos y estilo, nuestra forma de ser y relacionarnos.

“Usar el poder de decidir te da la capacidad de superar toda excusa para cambiar cualquier parte de tu vida en un instante”. Con esta frase del autor estadounidense y coach inspiracional Anthony Robbins, se evidencia la importancia de destinar parte de nuestro tiempo a establecer qué queremos en nuestra vida y, por el contrario, qué no. A través de esta gran virtud, podemos determinar aspectos tan importantes como nuestro trabajo, nuestra casa, nuestra pareja, nuestros amigos… Pero no todo tiene por qué ser a gran escala.

Más allá de las grandes elecciones vitales, la capacidad de decidir también aparece en los pequeños momentos de nuestro día a día, más comunes y, aparentemente, menos relevantes. ¿Voy a ver una película al cine o al teatro? ¿Una tarde en casa o un café con amigos? ¿Una canción de pop o una de rock? Pese a parecer cuestiones mínimas y sin importancia, todo suma en la configuración de nuestra personalidad y en nuestra manera de afrontar cada detalle de nuestra vida.

Por ello, nuestra sangría La Fresquita, llena de carácter, se basa en este concepto para establecer su filosofía de consumo. Ante todo, tú tienes el poder de decidir cuándo, dónde, cómo y con quién la tomas. Pero también de elegir qué escoges en otros aspectos de tu vida. Recuerda: #TúDecides.